Existen dos tipos principales de cirugías que ayudan a aumentar el tamaño del pene: una para aumentar la longitud y la otra para aumentar el ancho. Aunque estas cirugías pueden ser utilizadas por cualquier persona, no se ofrecen ya que se consideran únicamente como una mejora estética del cuerpo.
Además, este tipo de cirugía no suele producir los resultados esperados e incluso puede provocar complicaciones graves como deformación del pene, cicatrices o infección.
Por lo tanto, la necesidad de una cirugía de agrandamiento del pene siempre debe discutirse con un urólogo para comprender los beneficios y riesgos en cada caso.
Operación para aumentar el ancho.
La cirugía para aumentar el ancho del pene se puede realizar de dos formas:
- Inyección de grasa: la liposucción se realiza en otra parte del cuerpo, como los costados, el abdomen o las piernas, y luego se inyecta parte de esta grasa en el pene para llenarlo y aumentar su volumen;
- Colocación de malla: Se coloca una malla artificial y biodegradable con células debajo de la piel y alrededor del eje del pene para proporcionar más volumen.
Dependiendo del tipo de operación y de cada caso concreto, se puede producir un aumento del diámetro del pene de 1, 4 a 4 cm.
En cualquier caso, el riesgo es elevado: la inyección de grasa puede provocar la deformación del pene, mientras que con la colocación de una malla es más frecuente, por ejemplo, el desarrollo de infecciones.
Cirugía de aumento de longitud
Cuando el objetivo es aumentar el tamaño del pene, generalmente se recomienda la cirugía para cortar el ligamento que conecta el pene con el hueso púbico, permitiendo que el pene caiga más y parezca más grande.
Aunque esta cirugía puede aumentar el tamaño de un pene flácido en aproximadamente 2 cm, esto a menudo no se nota cuando el órgano está en posición erecta. Además, debido al corte del ligamento, muchos hombres informan que la altura de su pene disminuye durante la erección, lo que puede dificultar el contacto íntimo.
¿Cómo va la recuperación?
La recuperación de la cirugía de agrandamiento del pene es relativamente rápida y es posible volver a trabajar dentro de 1 semana después del procedimiento.
En la mayoría de los casos se puede regresar a casa al día siguiente de la cirugía, solo se recomienda descansar en casa hasta que se retiren los puntos y seguir algunas recomendaciones, que incluyen tomar analgésicos y antiinflamatorios recetados por su médico, así como mantener Tu pene seco y limpio en todo momento.
Las relaciones sexuales sólo deben reanudarse después de 6 semanas, o según las indicaciones de su médico, y el ejercicio más intenso, como correr o ir al gimnasio, sólo debe iniciarse después de 3 a 6 meses.
Otras opciones para agrandar el pene
Otras soluciones que existen para agrandar el pene utilizan pastillas o bombas de vacío, que aumentan la cantidad de sangre en los genitales y, por lo tanto, pueden hacer que el pene se sienta más grande.
Además, cuando se tiene sobrepeso, el pene puede estar cubierto de grasa, por lo que el urólogo también puede recomendar una liposucción de la zona íntima, que elimina el exceso de grasa y, por ejemplo, abre mejor el eje del pene.